Tendría que estar durmiendo.
Y no puedo.
Y me da miedo
no llegar a mi objetivo,
que mi propio vacío me consuma
en una espiral de mentira
y fantasía ausente,
hiriente.
Tengo miedo de haber recorrido el camino erróneo,
de haberme separado para ir a ninguna parte.
Tengo miedo de la soledad,
que, si ya la noto ahora,
me va a ahogar...
¿me va a matar?
Tengo miedo,
tengo mucho miedo de la soledad,
tengo miedo de la soledad,
tengo miedo de la soledad,
tengo miedo de la soledad.