27/11/14

[el sur]

(solo necesito encontrar el norte
un norte
mi norte
para poder huir al sur
allá lejos
debajo del ecuador
tan al sur
que no cambien
a penas
clima e idioma
donde es verano
cuando aquí hay frío
lejos
al sur)

25/11/14

Nado en mi obsesión.

voy a mi obsesión
y otra vez
caeré


¡Abyecta errancia...
que me ata de bruces
al desarraigo,
al eterno desconsuelo
del vagar sin distancia,
sin movimiento
ni tiempo!

Solo el viento
me guía
a los precipicios donde la decepción habita,
insoluble
como el hada que se congeló
en el desierto
allá donde habitan mis lágrimas.

Qué lástima.
Estar perdiendo(se)
constantemente,
es como acercarse siempre,
sin caer,
a un agujero negro.
El fracaso es inminente,
hay voces que jamás
han parado de repetirlo
y hay pies sin calcetines
que han quedado fríos.

Mi pálpito roído
no sabe ya bombear.
Los cuervos siguen invadiendo los aires
con gritos más naranjas
que el propio miedo.
Se zampan las entrañas de las miradas
y sufren.
Porque el dolor es ácido,
amargo,
amor,
sulfúrico,
veneno,
agujas,
puñales.
Pero los cuervos no paran de sufrir,
siempre sigo alimentándolos.

18/11/14

Perdido (Mikel Izal)

Siempre se descubren las canciones en los momentos clave. Ahora hay un halo azul que cubre este poema de Mikel Izal y que, con su voz y sus notas, me abriga clavándose allí donde nadie ha estado, donde solo se acercan las músicas que se arraigan en las comisuras de todo lo abstracto que habita en el interior de mis lunares, donde la esencia jamás duerme.



Perdido,
descalzo me ha encontrado el remolino.
Ya no sigo las baldosas del camino,
me he cansado de pisar en amarillo.

El viento
que parte en dos mi barca mar abierto
arrojándome adentro de la deriva,
veleta caprichosa que me guía.

Y en el fondo tengo tanto miedo
de encontrar mi estrella bajo el cielo.
Puede que al final salga corriendo,
cobijándome del caos de mi infinito,
ese desorden maldito
al que odio lo mismo que necesito.

¡Y no comprendo!
¿Adónde quiero ir,
de dónde vengo?
¡Los planes que diseña mi cerebro!
Nadie nos ha explicado nunca
las reglas del juego...

Y muero
si vivo en mi cuadrícula y no puedo
saltar de mi balcón al firmamento.
Voy a dormir para soñar despierto.

¡Mentiras
en este laberinto que es mi vida!
Voy mendigando luz por las esquinas...
Cien minotauros, ninguna salida.

Y ahora miro atrás y me arrepiento
de haberle robado tiempo al tiempo.
Me dejé llevar por el momento
por la rectitud de respetar el camino marcado,
dar los pasos acordados,
y, ahora, ¿dónde he terminado?

¡Y no comprendo!
¿Adónde quiero ir,
de dónde vengo?
¡Los planes que diseña mi cerebro!
Nadie nos ha explicado nunca
las reglas del juego...

¡No comprendo!
¿Adónde quiero ir,
de dónde vengo?
¡Los planes que diseña mi cerebro!
Nadie nos ha explicado nunca
las reglas del juego...

el día en que el hielo se deshaga y deje de agrandar las grietas que visten a las rocas de gris


el día que tenga ganas de llorar
y pueda hacerlo
ese día

ese día podré caminar
moverme con sentido lógico
dejar de correr de un punto a otro
aleatoriamente
veloz, sin cesar

y es que me estremezco
me entumezco, me ofusco y tiemblo
cuando alguien me mira a los ojos
pueden ver más allá
más que yo
de mí misma
desarmarme
hacerme vulnerable

y yo no
yo soy fuerte
soy la roca, el hielo
soy las venas llenas de humo y palabras
llena de todo
tanto todo
que se acumula una nada enorme
invencible
indeleble

quizás todo lo que encierro
es lo que da forma a mi cuerpo
que sí, que yo lo tengo todo dentro
condensado
tan presionado

porque yo no me desmorono
jamás
yo soy fuerte
yo soy la roca, el hielo

·

la roca llena de grietas
penetradas por el hielo puñal
que quebranta las piezas
las desordena y les miente
la roca que necesita llorar
hacer que el hielo se derrita
pero no hay calor dentro
ni alrededor

15/11/14

between light and nowhere

la lista de fracasos crece
es enorme, gigante
se ha hinchado tanto 
se ha comido el bote de los éxitos
tan enorme es el globo
he llegado al espacio
floto entre astros
sin órbita
ni oxígeno
suspendida en el vacío
antes lleno de todo
pero ahora harto de correr sin rumbo

-

(Tengo la sensación de que alguien va a activar la gravedad de golpe y voy a caer sin remedio hacia ningún sitio, no hay fondo, por toda la eternidad. Y si aún no ha pasado eso es porque estoy rodeada de luces, que no entiendo por qué están ni porqué vinieron y menos por qué se quedaron, pero que están ahí y dan calor.)

13/11/14

(de como el dolor se cala si no encuentra culpables)

qué más da
si todo me sale bien
pero del revés

/noches destempladas
bajo la sombra de un suspiro/

qué más da lo que grite
si siempre hay algo sobre mí
que me hace invisible

/mecerse entre humo
y labios suaves cuando cae la noche/

qué más da ya
cualquier esfuerzo
solo provoca dolor

8/11/14

En mis paréntesis de un tiempo, oasis.

La felicidad no es un estado de ánimo permanente, es algo que se saborea poco a poco, por momentos. Por instantes, parece que dure días, pero a veces tan solo dura unas horas. Segundos en los que la música te vibra en los ojos, muy adentro en la mirada; en los que la música vive en la comisura de los labios y te hace sonreír por la calle. Aunque nada salga bien, aunque todo esté perdido y difuminado.

Es por eso que dicen que la felicidad depende de unx mismx. Por esos oasis, diminutos o gigantes -jamás eternos.

4/11/14

Panda.

De com hi ha poliedres amb tants vèrtexs i forats que costa que encaixin; de com, després de moltes voltes, poden connectar tant bé. De com el temps fa que els angles més aguts dels cossos puguin convertir-se en corbes adaptables. De com les muralles externes i internes poden anar enderrocant-se, de com deixem que ens les traspassin.

(Ara em tocava a mi, petita I. És el meu torn de parlar-te entre secrets i de fer-te saber la sort que és tenir-te.)

Las luces más cegadoras y cálidas las desprenden los cuerpos más diminutos y frágiles.
Los refugios pueden ser miradas azules, como la tuya, la que jamás pregunta y la que siempre parece entender.

Si yo soy una luna necesito luces que me iluminen, y tú cada vez irradias más fuerte mi piel y, fijándote en la disposición de mis grietas, me abrazas para que el frío no cale en ellas y no me haga pedazos. Lo haces desde lejos, en silencio, quizás sin darte cuenta. Algo que sirva como luz... porque lights will guide you home.

Nadie te ha visto temblar, porque eres el mar (tan azul, tan gris, tan lleno de colores), y te pido que no te escondas. Que hasta los mares más poderosos se convierten en sus propios náufragos y necesitan a veces un rescate. Que tus mares jamás se queden dentro porque implosionar tan solo provoca grietas de las que dejan penetrar un frío que, cuando hiela, quebranta hasta el aire.

Petita llum... gràcies per ser un oasi quan el desert m'ofega.

3/11/14

Segundo movimiento: lo de fuera.

Se acabó, el odio me arrolló la razón, con mi época estoy comprometido y el amor se fue volando por el balcón adónde no tuviera enemigos. Y ahora estoy en guerra contra mi alrededor, no me hace falta ningún motivo. Y es que soy maestro de la contradicción y experto de romper lo prohibido.

No es como si anduviese siempre en espiral, dando vueltas a un eterno bucle creado por mí. Más bien es un camino zigzagueante, lleno de paredes con espinas y espejos. Es una senda con tantas y tantas esquinas que cada tramo parece una cárcel. Y, a pesar de haber construido yo misma todas sus partes, corro entre sus kilómetros chocándome contra todo, mirando constantemente hacia atrás para no olvidarme de que estoy huyendo.

Y sigo preso... pero ahora el viento corre alrededor.
Carne y hueso... se muere de hambre el mundo alrededor.

Llevo tanto tiempo huyendo que se me olvidó mirar hacia adelante estando despierta. Me concentré en separar mi camino, pero no fijé un objetivo y ahora se extiende sin dirección, hacia adelante, hacia detrás, retorciéndose, deformándose, arañando en silencio.

Necesito saber...
(Dime tu nombre.)
... ¿de dónde sale el sol y de qué se esconde?

Alguien tiene que amarrar esta deriva.
No quiero ser náufraga entre muertos vivientes.
Vuelvo a necesitar la huida (una huida que jamás cesó).

Y es que perdí la vista del eje del salón y ando continuamente torcido.

Buscar respuestas en otros lugares. Otros países. Estoy segura que no sirve de nada buscar respuestas, ya que no espero que contesten ninguna pregunta. Pero no puedo evitarlo. Me da miedo la eternidad de una nada inalcanzable, de ecos de sueños y de posibles flores brillantes.

Abrí los ojos para ver, con el destino me encontré de cara. Lo tengo todo a medio hacer, me preguntaba si tal vez mañana...

Es un descontrol silencioso,
no hay miradas ni roces inesperados.

Si hay algún escalón pa' dar un tropezón, voy de cabeza.

No, porque nadie nunca está mirando.
Nadie nunca siente dentro
y mucho menos se pregunta
qué hay detrás el color de los ojos de la gente.